Daniela y yo nos conocimos tiempo atrás en 2014, durante la primavera de nuestro primer año en la secundaria. Ambos nos habíamos inscrito en atletismo y tuvimos breves interacciones mientras corríamos vuelta tras vuelta durante la fría primavera de Colorado. Mantuvimos el contacto a lo largo de los años de bachillerato en términos amistosos, pero sin interactuar más allá de toparnos ocasionalmente. Después de graduarnos, cada una tomó su propio camino. Pasaron los años y de repente, Daniela me envió una nota para mi cumpleaños #23, deseándome lo mejor y preguntándome cómo estaba. Me sentí halagado de que recordara mi cumpleaños después de tantos años, y comenzamos a intercambiar mensajes para ponernos al día un poco. Después de un breve intercambio, la conversación se apagó y cada uno prosiguió con su vida. Un poco más de un año después, vi que ella estaba pasando por Florida en su camino hacia Colombia durante un viaje con sus amigas. Yo estaba estudiando en la Florida en ese momento, así que me puse en contacto, recordando la agradable conversación que habíamos tenido el año anterior, para ver cómo estaba y cómo le trataba la vida. Estoy seguro de que se sorprendió por el mensaje inesperado, pero conectamos de inmediato y comenzamos a hablar constantemente durante su viaje. Al final de sus vacaciones, habíamos hecho planes para vernos, y antes de darme cuenta, estaba conduciendo mi carro desde la Florida a Nueva Orleans (donde ella vivía) para pasar un fin de semana y ver si había algo especial entre nosotros? Un fin de semana se convirtió en dos. Esos dos fines de semana culminaron con el inicio de nuestra relación de novios en junio de 2022. Lo que siguió fueron años de relación a distancia, llamadas telefónicas y planificación de viajes para vernos. A través de todo esto, nuestra relación continuó creciendo y nuestro amor se fue enriqueciendo en cada una de nuestras vidas. El matrimonio era el paso natural siguiente esperando con ansias la oportunidad de intercambiar nuestros votos y comprometernos plenamente con esta relación! Al escribir esto, me siento humildemente impactado por la importancia de esos pequeños momentos, los cuales a mis ojos, solo pueden atribuirse a la guía amorosa de Dios. Nuestra historia es una de esas oportunidades aparentemente inocuas que, en última instancia, nos llevaron del uno hacia el otro. Estoy lleno de gran alegría por haber encontrado a alguien tan especial como Daniela, esperando emocionado por nuestra próxima boda. ¡Únete a nosotros para celebrar el comienzo de nuestro matrimonio en Mayo de 2025 en Cartagena, Colombia!